domingo, 29 de noviembre de 2015

Desamparados empato 0 a 0 con Güemes de Santiago del Estero

Querer no siempre es poder. Y a este Desamparados, que buscó siempre, que no se entregó jamás, le tocó masticar la impotencia en el partido de ida de los cuartos de final por uno de los tres ascensos del Federal B. Fue empate y sin goles, pero con el plus de que Desamparados nunca pudo acomodar el juego a sus pretensiones. Nunca tuvo volumen de juego como para romper el esquema de los santiagueños que vinieron a no perder y se llevaron ese objetivo. Desamparados fue mucha entrega, mucho corazón y demasiados pelotazos, lamentablemente. Pero la serie está abierta porque no ganó pero tampoco perdió y el jueves, en Santiago del Estero, el que tendrá que cambiar libreto será Güemes, arriesgando algo más, abriéndose un poco más y ofreciéndole esos espacios que el Puyutano sabe explotar.

En el comienzo, la presión de Sportivo se hizo sentir en los primeros 15’ y tal vez haya sido el lapso de todo el partido en el que Desamparados jugó mejor. Ganó con Ramírez y su velocidad, se movió bien Davio por el centro y en especial, por la izquierda, Carlos Lucero amagó con ser la figura de la noche. Es más, a los 15’ metió un pelotazo que se le clavaba en la espalda al arquero Montenegro pero hubo reacción y la sacó al corner. Era y fue el mejor momento de Sportivo que siguió insistiendo pero ya sin la claridad de aquel arranque y Güemes lo metió en su juego porque cortó mucho, se cerró muy bien atrás y le fue cortando los caminos para lastimarlo. A los 33’ Erwin Ramírez tuvo una chance pero su definición se fue por arriba.

En el complemento, se esperaba el aluvión verdiblanco pero nunca se concretaría. Es que Güemes lo volvió a poner incómodo, lo llevó al roce permanente y Desamparados empezó a nublarse apurado por la presión de tener que abrir el marcador y hacer esa diferencia que puede ser vital para clasificar. Sin fútbol, llovieron más pelotazos para el duelo en solitario de Davio mientras que ni Terrero ni Lucero por los dos costados pudieron desequilibrar. Sportivo se fue vistiendo de impotencia. Quería y no podía. Dillon mandó a Silvio Prieto para buscar soluciones por el piso y aparecieron algunos destellos. Claro, nunca lo suficientes como para cambiar una historia compleja, incómoda, molesta. Desamparados se quedó con las ganas pero sabiendo muy bien que aún nada está dicho.

Claves
1: Impotencia. Esa fue la síntesis de un Desamparados que buscó con lo que tenía a mano pero se quedó sin respuestas futbolísticas.
2: Libreto. Güemes vino a buscar un punto en San Juan y jugó a eso. Orden, mucha marca y una postura absolutamente calculadora.
3: Argumentos. Desamparados puso todo pero no tuvo el respaldo desde lo colectivo y en el juego como para poder cambiar la historia