Desamparados se midió el traje

Por historia y sobre todo por cómo se armó para afrontar este certamen, Desamparados aparecía en la previa como uno de los candidatos del torneo. Pero claro, para demostrarlo debía por obligación dar el primer paso con firmeza y así lo hizo porque venció, con dos goles de Gonzalo Narváez a Trinidad por 2 a 1 en un encuentro válido por la primera fecha de la Zona 7 del Federal “B”. El triunfo toma validez porque en esta ocasión el certamen será corto, y en diez encuentros definirá a los tres clasificados que lucharán en llaves Play Off por los dos descensos al Federal “A”.

Con una gran concurrencia de público en el Bicentenario, el choque mostró buenos pasajes de fútbol aunque también demasiadas imprecisiones fruto de las pretemporadas. En el arranque Desamparados comenzó manejando los tiempos con Valori y se adueñó rápido de la pelota, a los 10’ generó la primera situación con un centro que metió el cordobés Lucas Godoy para Narváez, pero que alcanzó a despejar al córner Nahuel Altamirano. A Trinidad le costó acomodarse pero cuando lo hizo comenzó a inquietar como a los 17’ cuando Paul Martín -que estuvo el primer tiempo intratable para la defensa del Víbora- ganó en velocidad y cuando se encaminaba al gol, Villalba lo bajó de atrás en la puerta del área, pero ese tiro libre que ejecutó el sanjuanino Godoy se fue apenas por encima del travesaño desperdiciando una chance clara para el local. El encuentro se hizo de ida y vuelta y en una de esas arremetidas, pegó Sportivo a los 25’ cuando Valori, de media distancia, estrelló la pelota en el palo y en rebote, Godoy asistió a Narváez para que de cabeza pusiera el 1-0. La ventaja para la visita solo hizo que creciera el local. Reina probó a Pablo Lucero con un remate desde afuera del área y a los 40’, otra vez Paul Martín desbordó, le ganó una vez más a Villalba y cuando era gol, apareció Rebeco para despejar al corner. Desde allí vino el gol, porque tras una serie de rebotes, Hernán Vega anotó de cabeza el 1-1. En el complemento, los dos equipos sintieron el desgaste y el nivel de juego bajó notoriamente. No había pasado mucho cuando a los 14’ apareció otra vez Narváez. El ex San Martín, recibió un pelotazo largo y tras una gran corrida por izquierda, definió cruzado ante la salida de Guirado. El 2-1 abrió nuevamente el partido y lo hizo atrapante. Porque Trinidad se desesperó buscando el empate y lo tuvo con Ramón Avila a los 20’ cuando Ramos lo dejó incómodo a Lucero y Avila no pudo definir. Desamparados pudo haber estirado la ventaja con un intento de Vila, pero aguantó en los minutos finales y terminó consiguiendo un triunfo clave como midiendose el traje de candidato.

Costumbre

Acertada fue nuevamente la decisión de la dirigencia de Trinidad llevando su localía al Bicentenario para que pudieran asistir los visitantes. Ayer, la Popular Norte donde se ubicaron los hinchas de Sportivo mostró un excelente marco de público, tal cual ocurrió la temporada anterior. Esta medida tomaría también Peñarol en la tercera fecha, sabiendo de la concurrencia puyutana.


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