Este domingo, Desamparados logró la clasificación a la siguiente
ronda en el campeonato del Federal B tras vencer a Atenas de Pocito por 2
a 1. Luego del partido Ricardo Dillon habló sobre el enfrentamiento.
"Sufrimos más de lo que merecíamos, lo tuvimos para liquidar al
partido y poder terminar tranquilo pero con el fantasma de Luján el
nerviosismo se apodera de los jugadores. Finalmente clasificamos con un
punto de diferencia.Tenemos que seguir trabajando para que en esta
cancha, los nervios no nos juegen en contra, para que el equipo no se
meta atrás. Me voy conforme porque logramos el objetivo. Lo que cuesta
vale, y hay que valorar mucho esta clasificación. Estamos a la altura de
la circunstancia y hay que seguir peleando.", expresó el DT a Radio La
Voz.
El director técnico también habló sobre los conjuntos descendidos.
"Me da mucha pena que se hayan ido los equipos sanjuaninos al descenso.
Era tan parejo que un partido te podía hacer la diferencia. Estamos
adentro de los que seguimos laburando y es un mérito de todos. Lo
compartido con todos. Lo que viene es un premio para los clubes que han
clasificado y por supuesto todos tenemos derecho a soñar".
"Sportivo se ha caracterizado por una hinchada que contagia. Cuando
en el partido con Peñarol nos hicieron un gol la gente cantaba más
fuerte, y por ello dejamos la vida. A veces deben sacarse la plata de la
comida para venir a verlos y eso es impagable. Hace unas seis o siete
fechas atrás, sistemáticamente lo insultaban a Davio todos los partidos.
Se ponían en el codo del Bicentenario, y yo no lo podía entender. Para
esos negados a los que no les conozco el nombre, para ellos también es
esto", habló sobre la hinchada.
Finalmente, habló sobre lo que le espera al club. "Todo va a ser
difícil y parejo. Ahora empieza a jugar la suerte, dependiendo de cuándo
te toca la fecha libre. Espero que podamos recuperar jugadores. Este
equipo se ha sacado un peso de encima y tenemos que seguir", sentenció.
Palabra de los Protagonistas:
"Nos costó mucho, un grupo q desde el principio no nos salieron
bien las cosas, pero nos hicimos fuertes, la gente nos hizo fuertes",
contó el goleador visiblemente emocionado, a los micrófonos de Radio La
Voz.
"Tengo lágrimas de emoción porque sufrimos mucho, la vinimos
peleando. Vinimos a un club grande tratando de hacer historia. Muchos
tenemos familia y se nos hizo cuesta arriba. Es normal romper en
lágrimas, queremos dejar al club en lo más alto. Quedaron 2500 colegas
sin trabajo, y nosotros somos privilegiados que seguimos peleando por el
mango del día a día. Queríamos tratar de pensar en nosotros y ganar que
era lo más importante", agregó Pablo Costi.